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SsangYong XIV Air y Adventure, lo que se viene

La marca coreana abandona la estética estrambótica y apuesta por un SUV más racional.

SsangYong XIV Air y Adventure, lo que se viene

SsangYong es una de esas marcas que apenas conocemos. En nuestro parque automotor contamos con la infame particular Actyon, cuyo diseño es, por así decirlo, polémico. La marca sabe que una identidad exótica a veces perjudica las ventas, por eso sus diseñadores optaron por un estilo más racional, alineado al resto de las automotrices coreanas (¿alguien dijo Kia Soul?) para poder asegurarse así un mayor capital en sus ventas.

Por eso, en el Salón de París, la marca presentó dos nuevos concepts que siguen los lineamientos marcados por el XLV, que pudimos ver en el pasado Salón de Ginebra. Ahora, los XIV Air y Adventure se posturan como el último ensayo antes de lanzar el modelo definitivo de producción, el cual, según la marca, tomará un poco de cada concept para conformar su estética definitva.

El XIV, tanto en su versión Air como Adventure, cuenta con un largo total de 4190 mm y una distancia entre ejes de 2600 mm. Obviamente, la versión Air es la que ofrece un techo tipo Targa y la Adventure un prominente portaequipaje listo para ser cargado y viajar. En el interior, la información se despliega en una gran pantalla táctil ubicada de forma vertical en el medio del tablero, algo que quizás no se mantenga en el modelo de producción.

Ambos concepts adelantan la motorización definitiva, que según SsangYong podrá ser tanto Diésel como naftera, ambas con 1.6 L de cilindrada. Estas plantas motrices podrán acoplarse a una caja automática o manual de seis velocidades, y contar con tracción sólo en las ruedas delanteras o de forma integral. Seguramente la versión con tracción simple será la que más se venda, ya que la marca es conocida por ajustar al máximo el precio de sus productos y así posicionarse como la oferta más tentadora ante quienes no la conocen.

Se rumorea que a partir de 2015 se empezará a comercializar el nuevo SUV de la marca en su tierra natal, seguramente dependerá de la aceptación en aquel mercado la decisión de la marca y (de los importadores) de traerla a nuestro país.

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